Manos

Manos que tocan, acarician, abrazan, acercan, disponen y mandan. Hablan el idioma de los roces, de las texturas, de la seducción… Solo cuando tocas las manos de alguien sientes la belleza de todo su ser. Iniciadoras de la evolución, imprescindibles para la paz y, aun así, para el despotismo, la violencia, la distancia. Y discurro mientras mis manos atan los cordones de mis zapatos, mientras escribo, mientras cocino y compongo música, sin apenas percibir que son ellas las que me guían. Unas manos demasiado pequeñas para todo lo que he recibido. Quizá las haya infravalorado.

No concibo la vida sin usar mis manos. ¿Y tú?

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©Fotografías y texto : Javier Linares